Terremoto. Andalucía. ¿Lo sentiste?.

_A las 11,35 de esta mañana, el instituto Geográfico Nacional ha registrado un seismo de magnitud 6,3 en la escala Richter, con epicentro al sureste del Cabo San Vicente. En Sevilla, Cádiz y Huelva se ha percibido como de magnitud 4, e incluso en algunos edificios altos de Madrid se ha notado el movimiento. No en vano, en Andalucía es probable que se produzca un gran terremoto más pronto que tarde, como el que ocurrió en 1680 de intensidad 9 o el de 1884 de intensidad 10 en la escala de Mercalli; y es que este tipo de terremotos son periódicos.

_Un gran terremoto ocurrió el 1 de noviembre de 1755 con epicentro en el mar al SW del Cabo de San Vicente y de intensidad máxima 10 de Mercalli: generó olas gigantescas que afectaron en España a las costas de Huelva y Cádiz (Tsunami); pero sobre todo asoló la capital de Portugal, Lisboa, causando unos 10.000 muertos. Se calcula que este seismo pudo alcanzar una magnitud de entre 8,5 y 9 grados sobre la escala de Richter y fué el que dañó la Iglesia de Peñaflor.
_Esta actividad sísmica se justifica por el contacto que se produce entre la placa africana y euroasiática cuya falla recorre todo el perfil andaluz de las costas atlántica y mediterránea desde el SW del Cabo de San Vicente hasta Almería, pasando por el Estrecho de Gibraltar y las proximidades de Ceuta.
_Se denomina magnitud a la medida cuantitativa de la energía liberada por un terremoto; la magnitud de un terremoto no es lineal sino logarítmica, lo que quiere decir que la energía liberada por un terremoto de una determinada magnitud equivale, aproximadamente, a la energía liberada por unos 30 terremotos de la magnitud anterior, por lo que un terremoto de magnitud seis no es algo mayor que uno de magnitud cinco, sino que equivale, aproximadamente, a 30 terremotos de cinco juntos.
_La intensidad es una escala paralela a la de Richter que se aplica en función de los efectos de un seismo sobre las personas, los objetos, la naturaleza y los edificios. Esto quiere decir que primero se ha de conocer cuanto acontece en la superficie terrestre tras un terremoto para luego otorgarle un determinado grado de intensidad; no basta sólo con conocer la magnitud porque no todos los tipos de terreno ni de construcciones se comportan de la misma manera ante las sacudidas.