Un Haiku chileno: Necesito que alguien me recuerde.
Ayer estuve leyendo la entrada sobre los haikus en "Amebas a la deriva" cuando recordé que había guardado un poema de este tipo sacado del Blog de un chico chileno; en un primer momento dudé de su autoría porque el poema causa esa especie de desazón que causan los haikus, que nacen de la captación nítida de una sensación o de una realidad. Por su rotundidad, su simplicidad, su economía y su capacidad de sugerir cosas que no se dicen me pareció un haiku logrado, a la vez que parecía no encajar mucho en el lugar donde lo había descubierto; aún así, no encontré en la red referencia alguna que me haga pensar que el autor no sea otro que el dueño del citado blog, aquí os lo pongo:
"Necesito que alguien me recuerde".
Necesito que alguien me recuerde
qué día era
el día que me morí.
Los haikus interesaron mucho a poetas españoles como Antonio Machado, Juan Ramón Jiménez o Federico García Lorca, por cierto, los tres eran andaluces...
Juan Ramón Jiménez (1881-1958).
Está el árbol en flor,
y la noche le quita, cada día,
la mitad de las flores.
Federico García Lorca (1898 - 1936).
En el campo sin monte
una laguna clara,
manantial apagado.
Antonio Machado (1875-1939).
Junto al agua negra.
Olor de mar y jazmines.
Noche malagueña.
.......................................
Juan José Domenchina (1898-1959).
Lluvia de estío:
en los árboles verdes
cuelga sus nidos;
Enrique Díez-Canedo (1879-1944).
"Hay-kay de Buenos Aires"
La curva criolla de una voz
vuelve americana
la calle.
"El haiku también se ha hecho presente en tierras sudamericanas. Esto se concreta, por ejemplo, en las creaciones de Jorge Luis Borges o Mario Benedetti, quién publicó la obra Rincón de Haikus en 1999".
Mario Benedetti (Uruguay, 1920).
Testigo lóbrego
en el lugar del crimen
quedó la rata.
Una campana
tan sólo una campana
se opone al viento.
En la laguna
el agua es un espejo
sin exigencias.
Pasan la nubes
y el cielo queda limpio
de toda culpa.
En plena noche
si mis manos te llaman
tus pechos vienen.
Los pies de lluvia
nos devuelven el frío
de la desdicha.
Alfredo Boni de la Vega (Méjico, 1914-1965).
"Paraguas"
Flor de tristeza
que se abre cuando el llanto
del cielo empieza.
Jorge Carrera Andrade (Ecuador, 1903-1978).
Araña del suelo:
charretera
caída del hombro del tiempo.
"GOLONDRINA"
Ancla de plumas:
por los mares del cielo
la tierra busca.
Pablo Neruda (Chile, 1904-1973).
Hay algo más triste en el mundo
que un tren inmóvil en la lluvia?
Cómo se reparten el sol
en el naranjo las naranjas?
Jorge Luis Borges (Argentina, 1899-1986).
Lejos un trino.
El ruiseñor no sabe
que te consuela.
Algo me han dicho
la tarde y la montaña.
Ya lo he perdido.
La vasta noche
no es ahora otra cosa
que una fragancia.
Para saber más de los Haikus; más Haikus aquí (pdf).
6 comentarios:
Qué bello Haiku! De más está decir que este lenguaje es una de las expresiones más bonitas. Saludos!
me encantó.
te dejo besis.
Muy bonitos haikus, gracias por la mención.
No sabía que habían calado tanto entre la literatura latina.
Gracias a tí...tu entrada me sirvió de inspiración, a la vez que me recordó que tenía guardado este pequeño poema; desde que lo leí pensé en poner una entrada en el que apareciera y enlazarlo con otros haikus hispanos me pareció ideal. Un saludo.
Budokan y Carolita, a ustedes...
A ver si te dejo un libro de haikus que hicieron el año pasado los niños de un colegio de Palma. Es una bonita actividad para hacer con los críos y salieron cosas increibles.
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